Una nueva jornada de reclamos por parte de jubilados terminó este miércoles con momentos de alta tensión frente al Congreso Nacional, cuando efectivos de la Policía Federal intentaron dispersar la manifestación utilizando gas lacrimógeno. La situación obligó a los manifestantes a replegarse sobre la vereda, en medio de gritos y escenas de confusión.
La protesta, que forma parte de una serie de movilizaciones semanales impulsadas por organizaciones como la UTEP, busca visibilizar el deterioro de los haberes jubilatorios frente a la escalada inflacionaria. “No vamos a abandonar las calles hasta que se garanticen jubilaciones que permitan vivir con dignidad”, afirmaron desde la organización.
Desde hace semanas, los jubilados vienen concentrándose frente al Parlamento los días miércoles, en un reclamo sostenido que también ha contado con el respaldo de centrales sindicales como la CGT y las CTA. Exigen una nueva fórmula de actualización que equipare los ingresos al costo real de vida.
La marcha de este miércoles contó con fuerte presencia de fuerzas de seguridad, incluyendo efectivos de la Gendarmería. Los incidentes comenzaron cuando se intentó liberar el tránsito y la represión derivó en la disolución parcial de la protesta.
El malestar del sector pasivo con el Gobierno nacional se profundiza, y algunos referentes advierten que las manifestaciones seguirán “hasta lograr respuestas concretas”. La jornada recordó a la del pasado marzo, cuando un operativo similar dejó heridos y detenidos, entre ellos el reportero gráfico Pablo Grillo.
