El inicio de octubre trae consigo una nueva ola de aumentos que golpean directamente a los bolsillos de las familias argentinas. Alquileres, luz, gas, transporte, peajes, colegios privados, prepagas, combustibles y servicios de telecomunicaciones son algunos de los rubros que sufrirán incrementos en las próximas semanas. Mientras los analistas proyectan que la inflación de septiembre rondará el 2%, muchos de los ajustes ya superan ampliamente esa cifra, lo que anticipa un escenario aún más complejo.
Alquileres: los contratos que siguen bajo la derogada Ley de Alquileres tendrán en octubre un aumento anual del 46,1%. Así, un inquilino que pagaba $650.000 por mes pasará a abonar casi $950.000. Para los contratos con actualización trimestral por IPC, el incremento será de 5,5%.
Luz y gas: desde el 1° de octubre rigen los nuevos precios mayoristas de la energía y el gas natural, con aumentos que en la provincia de Buenos Aires se traducen en un 1,5% promedio en la tarifa eléctrica de usuarios residenciales.
Transporte: el boleto mínimo de colectivos sube 3,9%. En el conurbano costará $550,30, mientras que en la Ciudad de Buenos Aires pasará a $546,54. En lo que va del año, los aumentos ya acumulan casi un 50%.
Peajes: las tarifas de la Autopista Buenos Aires-La Plata, el Sistema Vial del Atlántico y los accesos a la Capital tendrán subas de entre 4,8% y 6,4%. Por ejemplo, en Dock Sud el peaje para autos comunes alcanzará los $2.000 y hasta $2.500 en hora pico.
Colegios privados: los establecimientos con subsidio estatal en la provincia aplicarán un ajuste del 2,8% en sus cuotas.
Combustibles: la nafta y el gasoil aumentarán nuevamente en octubre por la actualización de impuestos, en línea con la política de incrementos mensuales.
Prepagas: las empresas de medicina privada aplicarán una suba que rondará entre 1,1% y 2,4%, según plan y región.
Telefonía, cable e Internet: las compañías de telecomunicaciones aumentarán alrededor del 3% en sus facturas, tras la desregulación de tarifas.
En este marco, el inicio del último trimestre del año encuentra a las familias enfrentando una nueva batería de incrementos que se suman a la pérdida de poder adquisitivo y a la inflación acumulada durante 2024.