Movimientos sociales y gremios marchan juntos en San Cayetano para rechazar el ajuste de Milei

Este jueves 7 de agosto, en el marco de la tradicional marcha de San Cayetano, se concretará una masiva movilización impulsada por la UTEP (Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular) junto a gremios, movimientos sociales, estudiantiles y de derechos humanos, para denunciar las graves consecuencias del modelo económico implementado por el gobierno de Javier Milei.

La jornada comenzará por la mañana con la ya clásica bendición de herramientas en Rivadavia y Cuzco, a una cuadra del santuario de Liniers, donde sacerdotes bendicen los trabajos de la economía popular: comedores comunitarios, cooperativas, reciclado, producción agroecológica, entre otros.

Luego, la columna de trabajadores iniciará su marcha hacia Plaza de Mayo, donde confluirán organizaciones de distintos sectores. La CGT, ambas CTA, el Frente por la Soberanía, el Trabajo y el Salario, agrupaciones de jubilados, feministas, estudiantiles y de derechos humanos, confirmaron su participación activa. “Marchamos por nuestros derechos, porque la comunidad organizada es la única esperanza frente al abandono”, expresó Norma Morales, secretaria adjunta de la UTEP.

Alejandro Gramajo, titular de la organización, aseguró: “Estamos atravesando una coyuntura de alta gravedad. El proceso electoral es importante, pero para nosotros la calle es fundamental para ponerle freno a este modelo de hambre y miseria. Queremos que esta pesadilla termine lo más rápido posible”.

Desde la CGT hasta agrupaciones universitarias como La Mella, CEPA, La Cámpora Estudiantil, el Movimiento Universitario del Conurbano, Evita y AUGE, se sumarán a esta jornada de unidad y lucha. También lo hará el colectivo Ni Una Menos, con el compromiso de visibilizar el impacto de las políticas del gobierno en el movimiento de mujeres y diversidades.

La movilización de este año será la primera sin la presencia física del Papa Francisco, a quien los movimientos populares homenajearán por su constante acompañamiento a las causas de los más humildes.

La convocatoria se da en un contexto de creciente malestar social, caída del salario, pérdida de empleo y avance del ajuste impulsado por el Ejecutivo nacional. Esta marcha busca ser una muestra clara de unidad y resistencia para frenar el saqueo y la entrega que denuncian desde los distintos espacios convocantes.