El proyecto para crear la Universidad Nacional de la Cuenca del Salado, una iniciativa largamente esperada por la región, entró en un momento decisivo y de alto riesgo. Aunque ya cuenta con media sanción de Diputados, su futuro quedó prácticamente atado a la voluntad del bloque de La Libertad Avanza, que por estas horas muestra una clara falta de interés en que avance. Desde el Municipio de Cañuelas alertaron que, si el Senado no lo trata antes del 30 de noviembre —cuando finaliza el período ordinario—, el expediente caerá y todo volverá a foja cero.
Para que la propuesta llegue al recinto, primero necesita obtener dictamen en un plenario conjunto de las comisiones de Educación y de Presupuesto. La primera está presidida por Wado de Pedro; la segunda, por el senador libertario Ezequiel Atauche. Hasta hace pocos días había un acuerdo para avanzar: se había programado una reunión para el miércoles 12 con el objetivo de firmar los dictámenes necesarios. Sin embargo, Atauche decidió cancelar de manera unilateral la convocatoria de Presupuesto, lo que bloqueó directamente el plenario y frenó el tratamiento.
De Pedro podría haber forzado la discusión en el recinto gracias a un entendimiento previo con el senador radical Maximiliano Abad, pero optó por mantener la palabra dada a Atauche, quien había asegurado que las comisiones trabajarían el proyecto. Esa confianza, que en la práctica dejó pasar una oportunidad clave, hoy se ve como un gesto político que terminó beneficiando al oficialismo libertario, que sigue dilatando el avance de la universidad.
Hubo otra instancia reciente donde también pudo haberse firmado dictamen, pero las autoridades de ambas comisiones decidieron que la reunión fuera meramente informativa. En esa ocasión participaron la intendenta de Cañuelas, Marisa Fassi, y el jefe comunal de Saladillo, José Luis Salomón, quienes plantearon por qué la nueva universidad es fundamental para el desarrollo de toda la región.
Con el reloj corriendo y el proyecto nuevamente en manos de La Libertad Avanza, el Municipio de Cañuelas remarcó que no se resignará: “Vamos a seguir insistiendo para que la comunidad sea escuchada y se respete la voluntad de sus representantes”, expresaron. Ahora, todo depende de que el Senado logre revertir la parálisis antes de fin de mes.