En un giro inesperado, el Bloque de La Libertad Avanza, conocido por su defensa de la libertad de mercado y la propiedad privada, presentó un proyecto de resolución que busca restringir la venta de artículos en la feria de emprendedores y artesanos de Cañuelas.
El proyecto, que parece contradecir los principios libertarios, busca prohibir la venta de artículos que no sean “artesanales” o “emprendedores”, es decir, aquellos que no sean realizados manualmente o que no tengan una transformación innovadora.
La medida, que ha generado controversia entre los vendedores y los defensores de la libertad de comercio, busca “proteger” a los comerciantes regulados en la Camara de Comercio, que nuclea Saco y el Concejal Libertario Pablo Olveira, de la competencia desleal de aquellos que venden productos comprados en tiendas mayoristas.
Sin embargo, muchos se preguntan si esta medida no es una forma de intervencionismo estatal, contrario a los principios libertarios. ¿No es la competencia beneficiosa para los consumidores y para el crecimiento económico? ¿No debería ser el mercado quien regule la oferta y la demanda, en lugar del Estado?
El proyecto de resolución ha generado un debate interesante sobre la libertad de comercio y la intervención estatal en la economía. ¿Será aprobado? ¿Será rechazado? La respuesta está en manos del Honorable Concejo Deliberante.
