Tras la salida de Lisandro Catalán y en medio de un clima de inestabilidad dentro del Gobierno, Diego Santilli fue confirmado por Javier Milei como nuevo ministro del Interior. El exdirigente del PRO, que recientemente había acompañado al oficialismo en la campaña electoral bonaerense, se reunió este lunes con el Presidente en la Quinta de Olivos y aseguró que está dispuesto a “hacer lo que tenga que hacer para lograr las reformas que nos comprometimos”.
Santilli contó que el llamado de Milei lo tomó por sorpresa: “Vengo de Paraná y en el camino me llamó. Me sorprendió el llamado del Presidente y le dije que sí al instante. Vengo trabajando con él y con Karina Milei. Comimos el lunes, pero no hablamos de este tema”, expresó ante periodistas.
El flamante ministro insistió en que su tarea será acompañar el plan de reformas que impulsa el Gobierno, al que calificó como “muy importante para la Argentina”. Sin embargo, su llegada también profundiza la alianza política y estratégica entre Milei y sectores del PRO, una relación que el libertario intenta consolidar para compensar su fragilidad parlamentaria.
En sus primeras declaraciones tras el nombramiento, Santilli escribió en redes sociales: “Gracias Presidente Javier Milei por la confianza y por pensar en mí para este desafío. La Argentina necesita avanzar en reformas estructurales que le permitan crecer, generar empleo y atraer inversiones”. A su vez, destacó que trabajará en equipo con Karina Milei, Manuel Adorni, Martín Menem y Patricia Bullrich.
El exvicejefe de Gobierno porteño celebró además el resultado electoral de octubre, interpretándolo como un respaldo a Milei: “Fue un apoyo de la sociedad al Presidente y un triunfo de los bonaerenses. Hicimos un acuerdo muy importante entre La Libertad Avanza y el PRO y ganamos una elección muy difícil”.
El nombramiento de Santilli es el cuarto cambio en el Gabinete desde las elecciones legislativas. En apenas unos días, Milei reemplazó a Gerardo Werthein por Pablo Quirno en la Cancillería, a Guillermo Francos por Manuel Adorni en la Jefatura de Gabinete, y designó a Javier Lanari como nuevo vocero presidencial.
Mientras el Gobierno intenta mostrar una imagen de renovación, lo cierto es que la seguidilla de renuncias refleja la creciente crisis interna del oficialismo y la dependencia de Milei de figuras provenientes del macrismo, que ganan cada vez más espacio dentro del Ejecutivo.
