La derrota del peronismo en las elecciones de medio término abrió una nueva etapa de autocrítica, debate y reorganización dentro de Fuerza Patria, hoy consolidada como la principal fuerza opositora al gobierno de Javier Milei. En un contexto de ajuste feroz, crisis económica y creciente polarización, las miradas apuntan ahora a cómo reposicionar al movimiento de cara al futuro.
A menos de una semana del resultado electoral, comenzaron los pases de factura y las reflexiones internas. Desde los sectores más cercanos a Cristina Fernández de Kirchner, las críticas se concentraron en la decisión de desdoblar los comicios bonaerenses, impulsada por Axel Kicillof. Varios dirigentes remarcaron que la expresidenta había advertido sobre los riesgos de esa medida.
Mayra Mendoza, intendenta de Quilmes, lo expresó con claridad en redes sociales: “El conurbano va a salvar a la Patria y Cristina tenía razón”. En sintonía se pronunciaron Florencia Carignano y Teresa García, quienes señalaron que el desdoblamiento fue un error estratégico. Desde el kirchnerismo sostienen que los resultados en provincias que mantuvieron elecciones unificadas, como Santiago del Estero, demuestran que el planteo de CFK era acertado.
Otros intendentes y dirigentes remarcan que la derrota no puede explicarse por un solo factor. La expansión territorial de La Libertad Avanza, su alianza con el PRO, el impacto del voto extranjero y la fragmentación de las listas peronistas fueron algunos de los elementos que incidieron. También se cuestiona la falta de una estrategia nacional clara frente al avance del discurso ultraliberal.
Desde el gobierno bonaerense, en tanto, buscan concentrarse en la gestión. “No tiene sentido responder a cada crítica; tenemos que seguir trabajando y mantener la unidad detrás de Axel”, señalan desde La Plata. Este viernes, Kicillof encabezará una reunión con los intendentes del Movimiento Derecho al Futuro para evaluar lo sucedido y delinear la agenda económica provincial, que incluye el Presupuesto 2026 y la Ley Fiscal.
Por su parte, el ministro Andrés “Cuervo” Larroque llamó a “dejar de hablar del pasado y ofrecer soluciones concretas a los bonaerenses”. “El peronismo no busca tener razón, busca resolver los problemas de la gente. Tenemos que generar esperanza para terminar con el suplicio que representa el gobierno de Milei”, afirmó.
En el Frente Renovador también insisten en dejar atrás las diferencias. Desde el entorno de Sergio Massa remarcan que “la única alternativa real a Milei es el peronismo” y que “la división interna solo favorece al oficialismo libertario”.
Otro frente de discusión se abre en el PJ bonaerense, cuyo mandato actual —a cargo de Máximo Kirchner— vence en diciembre. El debate sobre su continuidad o reemplazo expone nuevamente las tensiones internas, aunque el objetivo común sigue siendo reconstruir la unidad y ofrecer una alternativa sólida ante el desastre social y económico que profundiza Milei.
Pese a las diferencias, todos coinciden en algo: el pueblo espera respuestas y organización. El desafío para el peronismo será transformar la autocrítica en acción política y recuperar la esperanza de millones de argentinos golpeados por un gobierno que sólo ofrece ajuste y privilegios para unos pocos.