El salario se desplomó por tercer mes consecutivo y se esfumó la “recuperación Milei”

La supuesta recuperación del poder adquisitivo que el Gobierno de Javier Milei celebró en la segunda mitad de 2024 quedó definitivamente enterrada. Los últimos datos oficiales de la Secretaría de Trabajo revelan que el salario real de los trabajadores registrados del sector privado volvió a caer en abril, acumulando tres meses consecutivos de baja. Con esta nueva contracción, los ingresos quedaron incluso por debajo del nivel previo a la asunción presidencial en diciembre de 2023.

El informe oficial del “Panorama mensual del trabajo registrado” confirma que en marzo los sueldos formales bajaron un 2,5% en términos reales, sumándose a una leve caída en febrero. En abril, la tendencia se profundizó con otro retroceso del 1,6%. Así, se desvaneció completamente el ciclo de mejora que había arrancado tímidamente en abril de 2024, tras el shock inicial de ajuste.

La combinación es explosiva: no sólo bajan los sueldos, sino también el empleo formal, que en marzo descendió un 0,1%. A diferencia de 2023, cuando los despidos afectaban principalmente a trabajadores de menor calificación, ahora la caída salarial ocurre de forma generalizada, mientras se destruyen puestos de trabajo.

El nuevo ciclo de reducción de ingresos se explica por la política oficial de frenar las paritarias. Desde fines del año pasado, el Gobierno empuja a los gremios a cerrar aumentos por debajo de la inflación, instalando un techo de apenas el 1% mensual. Incluso se negó a homologar la paritaria de Comercio, que había acordado una mejora del 5,4% en tres meses, lo que afectó a más de 2 millones de empleados.

La lógica oficial, según analistas, apostaba a una baja más veloz de la inflación y a una economía que resistiera el ajuste. Pero no fue así. En marzo, la inflación trepó al 3,7%, y en abril fue del 2,8%. La caída del salario real en el primer cuatrimestre ya alcanza los 5 puntos.

Pablo Manzanelli, del Centro de Investigación de la CTA, explicó que esta dinámica salarial está vinculada al deterioro económico que provocó la corrida cambiaria previa al acuerdo con el FMI, y la posterior caída de reservas. “La inflación subió más rápido que los salarios, que fueron reprimidos por el Gobierno”, indicó.

Mientras tanto, en el comercio minorista, los supermercados frenaron sus listas de precios entre abril y mayo, no por milagros del mercado, sino porque el poder adquisitivo ya no resiste nuevas subas.

Los especialistas coinciden en que no habrá recuperación real en los ingresos en el corto plazo. A lo sumo, un amesetamiento producto de la baja inflacionaria, pero sin recomposición. Para el Gobierno, la baja de precios es un triunfo; para millones de trabajadores, es el reflejo de un ajuste feroz que licuó sus ingresos.