En medio de un escenario político cada vez más tenso, el presidente Javier Milei apuntó con dureza contra el expresidente Mauricio Macri, reavivando un enfrentamiento que se venía gestando en sordina pero que, con el rechazo del proyecto de Ficha Limpia en el Senado, terminó de estallar en la escena pública.
“El ladrón cree a todos de su misma condición”, escribió Milei en su cuenta de X, citando una frase que Elisa Carrió lanzó durante una entrevista con Jorge Lanata, donde responsabilizaba al gobierno de Cambiemos de haber sido garante de la impunidad de Cristina Kirchner. La referencia no fue casual ni indirecta: Milei apuntó directo al corazón del PRO y de su fundador.
El comentario presidencial, lejos de pasar inadvertido, se dio luego de que Santiago Oria —cineasta y colaborador cercano al mandatario— compartiera el video con Carrió, Lanata y Emilio Monzó, acompañado por una acusación directa: “El garante de la impunidad de Cristina Kirchner fue Macri”. Según el oficialismo, mientras Cambiemos frenó causas judiciales, la gestión de Milei habría dejado a la Justicia actuar con total independencia.
El mensaje no fue un exabrupto aislado. El propio Milei lo acompañó con una reflexión crítica hacia quienes, a su juicio, se niegan a entender el enfoque con el que él hace política. “Nuestro foco es sacar el país adelante, no polarizar por carencia de ideas”, escribió, en un intento por diferenciarse del estilo de confrontación tradicional de la política argentina. “CIAO”, cerró, con su habitual tono tajante.
Ficha Limpia, la chispa que encendió la mecha
El trasfondo del conflicto tiene nombre: Ficha Limpia, el proyecto que busca impedir que personas condenadas por corrupción puedan ser candidatas. Su rechazo en la Cámara Alta no solo provocó la desilusión de Milei, quien lo calificó como “infinita”, sino que abrió un fuego cruzado dentro de la oposición, exponiendo grietas que ya estaban presentes pero contenidas.
Desde el Gobierno, el jefe de Gabinete Guillermo Francos también salió al cruce. En declaraciones radiales, acusó a Macri de mostrarse “exaltado y nervioso” ante la posibilidad de perder influencia en la Ciudad de Buenos Aires, su histórico bastión político. Aunque reconoció que el vínculo personal entre ambos líderes podría estar irremediablemente dañado, sostuvo que eso no debería impedir eventuales acuerdos legislativos entre La Libertad Avanza y sectores del PRO en la provincia de Buenos Aires.
Francos incluso relativizó el peso del rechazo de Ficha Limpia y criticó la estrategia del PRO: “Montaron una campaña alrededor de esto, pero culpar al Presidente por el tratamiento legislativo del proyecto es absurdo”.
¿Ruptura o estrategia?
Aunque el enfrentamiento parece personal, tiene claras implicancias políticas. Con las elecciones legislativas en el horizonte, el control del Congreso será clave para el oficialismo. Y en esa carrera, todo acuerdo suma. Por eso, pese al enfrentamiento, Francos dejó abierta una puerta: “Aspiramos a un acuerdo para enfrentar al kirchnerismo. El que se opone, que se haga cargo”.
En este nuevo capítulo de la política argentina, el conflicto entre Milei y Macri no solo refleja diferencias ideológicas o tácticas. También evidencia una disputa por el liderazgo de la oposición, en un contexto donde los límites entre aliados y adversarios se desdibujan cada vez más.