La visita de un grupo de diputados de La Libertad Avanza a represores condenados por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar ha generado una gran polémica. La foto publicada muestra a los legisladores sonriendo y charlando con genocidas como Alfredo Astiz, Adolfo Donda y Raúl Guglielminetti, entre otros.
Esta visita es un claro desprecio a las víctimas de la lesa humanidad y a sus familias, que aún buscan justicia y verdad después de tanto tiempo. Los diputados libertarios han demostrado una falta de sensibilidad y compromiso con la memoria y la justicia, al reunirse con personas que cometieron crímenes atroces contra la humanidad.
La visita también ha generado críticas por la falta de transparencia y la ausencia de una agenda clara. La reunión con los represores sugiere que los diputados libertarios buscan promover la impunidad y la libertad para los responsables de crímenes de lesa humanidad, en lugar de defender la justicia y los derechos humanos. Esta actitud es inaceptable y va en contra de los valores democráticos y de respeto a las víctimas.
La foto es un recordatorio de la impunidad que aún prevalece en Argentina, donde los responsables de crímenes de lesa humanidad siguen siendo tratados con lenidad. La visita de los diputados libertarios es un paso atrás en la lucha por la justicia y la memoria, y un claro ejemplo de la falta de compromiso con los derechos humanos.
